Desarrollo de tecnología, el reto para 2010: Silva-Herzog

Somos una nación con miedo al cambio, asegura el economista

México es un país que genera una gran resistencia a la tecnología, es una nación poco activa en cuestiones de innovación, expresó el economista, académico y político Jesús Silva-Herzog Flores durante el Segundo Foro de Gobierno “Celebrando el Bicentenario”, organizado por Oracle México, la compañía de software para negocios más grande del mundo.

 

“Somos una nación que prefiere quedarse con lo que tiene por miedo al cambio, el más vale malo por conocido que bueno por conocer forma parte de nuestra idiosincrasia, eso es muy común en materia de tecnología, por ello, uno de los retos para el gobierno de cara al 2010, es estimular más el conocimiento y el uso de las herramientas tecnológicas”, aseguró el ex secretario de Hacienda durante su ponencia “Retos a los que se enfrenta el Sector Público en México” llevada a cabo en la Ciudad de México.

 

En un esfuerzo por impulsar el desarrollo del sector público en nuestro país, la empresa Oracle México, proveedor número uno de software empresarial para el sector público, pretende con este foro generar espacios de conocimiento donde los convocados intercambien ideas, propuestas, inquietudes y estrategias apoyadas en el uso eficiente de la tecnología.

Horacio Hernández, Director General de la trasnacional en nuestro país, aseguró que México necesita en este año de festejos dedicados al Bicentenario, “entrar en una nueva etapa de transformación, en una modernización que sea capaz de dar los servicios apropiados y de crear  una gestión de gobierno que administre los recursos, y que éstos, a su vez, se gasten apropiadamente” señaló.  

 

“Con este foro queremos generar una red de individuos para motivar a un cambio, no como un festejo patriótico, sino como una reflexión profunda: ¿cuánto más debemos esperar para hacer una modernización en nuestro país?” expresó.

 

El director de Oracle en México, subrayó que es necesaria una modernización para lograr un progreso, atraer la inversión a nuestro país, y que el gasto social se vaya al lugar correcto. “Si queremos tener un gobierno que no tenga corrupción y un gobierno trasparente, necesitamos modernización”, enfatizó.

 

Por su parte, Silva-Herzog aseguró que las tecnologías de la información pueden  ayudar a resolver diversos problemas del país y a contribuir con el desarrollo de la sociedad.

Detalló que la realidad y las perspectivas económicas que enfrenta México para este año, son el reflejo de la crisis financiera que se vive a nivel mundial.

“La crisis económica global dejó vulnerabilidades en nuestro país en el ámbito fiscal, en el financiero y en las relaciones económicas con el exterior; las perspectivas económicas de México para los próximos años, están ligadas de manera directa a los logros que el gobierno tenga frente a estas tres vulnerabilidades que han quedado expuestas en los últimos tiempos” dijo.

 

Los retos en materia de función pública para el 2010, de acuerdo con el líder de opinión, son: recuperar la prioridad del crecimiento económico en México equilibrando las finanzas públicas y las privatizaciones; trabajar en las elevadas tasas de desempleo, en la eficiencia operacional de los costos y de la calidad de los servicios públicos; así como incentivar a una cultura digital en nuestro país” añadió.

 

“La tecnología debe ser un objetivo primordial de la política económica, para ello se requiere recuperar el papel activo, prudente y promotor del Estado”, aseguró.  

 

Concluyó que si bien México está lejos de tener un nivel adecuado en educación tecnológica, se va por buen rumbo: “el gobierno, por una parte, debe de tomar una actitud mucho más promotora, y la sociedad, por otra, debe quitarse la resistencia al cambio”, puntualizó.

Publicado en Milenio Diario

Función Pública prepara agenda digital nacional

Brindará banda ancha a todo el país

Durante el segundo Foro de Gobierno “Celebrando al Bicentenario” que organiza la compañía de software para negocios Oracle México, Rodolfo Torres Espejo, titular de la Unidad de Gobierno Digital de la Secretaría de la Función Pública, informó que la dependencia prepara una Agenda Digital Nacional que servirá como estrategia para integrar a todos los actores políticos, económicos y sociales del país.

 

“El propósito de esta agenda es desarrollar una cobertura nacional de tecnología de la información con la que se logre una administración efectiva y eficiente que ofrezca, mediante el desarrollo tecnológico, mayores servicios a los ciudadanos” informó, además, agregó que servirá como un catalizador para la integración de las regiones urbanas y rurales del país. 

 

Torres Espejo aclaró que la propuesta que se tiene es una parte la Agenda Digital Nacional y que el proyecto final debe ser el resultado del esfuerzo de todos los sectores. “Se debe promover el desarrollo del gobierno digital mediante la vinculación con los gobiernos nacionales e internacionales, con la industria, la academia, la sociedad civil y principalmente con el gobierno, si no existe esta integración, sólo se tendrán agendas sectoriales” aseguró.

 

Las estrategias de la Agenda Digital Nacional son crear una cultura entre los ciudadanos sobre una sociedad de la información a través del acceso y conectividad digital, la innovación, el marco jurídico, la tecnología verde y la alfabetización digital. 

 

Los beneficios potenciales de la Agenda Digitan Nacional de acuerdo con el funcionario son el acceso de banda ancha a Internet para toda la sociedad, competitividad y riqueza nacional, “está comprobado que los países que ha adoptado una agenda digital en sus gobiernos, han incrementado su competitividad” garantizó.

 

El titular agregó que se está buscando tener una Ley de la Información en Comunicación, “tenemos leyes en casi todos los sectores, pero el de esta área está  completamente descuidado, por lo tanto, si no hay una norma ¿quién nos dice cómo debemos de hacerlo? además, el día que se tenga el documento final, alguien tendrá que vigilar que se cumpla” advirtió.

 

Por otra parte, Torres Espejo adelantó que la dependencia está por concluir el proyecto de ley de la Firma Electrónica Avanzada; firma ciudadana con la que se podrá declarar y pagar impuestos de manera electrónica, “esto facilitará el control interno para la firma de documentos y reducirá el uso del papel, además será el enlace con el gobierno en todos los servicios digitales que ofrece” señaló.

México • Nancy Zamora

Publicada en Milenio Diario 

Reinauguran museo de la torre Latinoamericana

La galería se construyó en 2006. Foto: Mónica González

Nos recuerda cómo sobrevivió el edificio al terremoto de 1985: Jacobo Zabludovsky

Con la historia ilustrada del Centro Histórico, el museo de la Torre Latinoamericana fue reinaugurado con la presencia del periodista mexicano Jacobo Zabludovsky, quien durante el evento, expresó que la exposición reúne testimonios valiosos de la historia de la ciudad. “Este museo recuerda cómo se construyó el edificio y cómo sobrevivió al terremoto del 19 de septiembre de 1985, el más grande que ha sufrido la Ciudad de México" dijo.  

El líder de opinión, quien fue el invitado especial y cortó el listón inaugural en el evento, compartió sentir alegría ya la vez tristeza al recordar el siniestro: “tristeza por ver la ciudad destruida, pero alegría porque este edificio sobrevivió a la tragedia" aseguró.

Además, recordó  que la torre fue el único inmueble de la zona que no sufrió daños a pesar de la fuerza del temblor gracias a la ingeniería de este inmueble considerado “Precursor del Edificio Inteligente” y uno de los rascacielos emblemáticos más importantes de la Ciudad de México.  

“Este edificio sobrevivió como un símbolo de la voluntad de los mexicanos de sobrevivir a sus tragedias, desde 1725 hemos convivido con este tipo de desastres, pero los que vivimos en la ciudad, hemos sabido superar estos sucesos” aseguró.  

El museo, construido en el año 2006, ofrecerá al público de manera permanente la exposición “La ciudad y la Torre a través de los siglos”, en la que reúne fotografías del sismo del 85, además de imágenes de monumentos de la Ciudad de México como: el Palacio Legislativo, el Palacio Nacional, la Catedral Metropolitana, el edificio de Lotería Nacional, además de lugares importantes como Paseo de la Reforma, la Plaza de Santo Domingo, el Castillo de Chapultepec, entre otros.  

“Que tenga la oportunidad de reinaugurar este museo me hace sentir muy satisfecho” agregó, y aseguró que este museo, ubicado en el piso 38 de la torre, “representa el símbolo de la tenacidad del deseo de vivir de los mexicanos a través de la historia”.

Publicada en Milenio Diario

Niño pobre da limosna a catedrál con pantallas de plasma

Por: César Mtz

En el púlpito comenzaba la eucaristía: humo blanco, campanadas agudas y movimientos sacros. En los pasillos y entre los feligreses pasaban personas con canastas para depositar las limosnas. Hasta atrás, más allá de las bancas, rezagadas y con el rostro de quien siente pena o se siente observada, estaban dos mujeres indígenas, con sus cabellos largos y alborotados, ropa sencilla y zapatos de plástico. Cada una de ellas cargaba en su espalda, con ayuda del rebozo, a una niña; acaso tendrían seis y cuatro años las pequeñas que moqueaban hasta los labios y se hacían bromas en su hermoso y casi extinto lenguaje. Sentados en el suelo había otros dos niños, más grandes de edad, traviesos e inquietos como todos. Y apenas un paso atrás, recargadas en el muro de la catedral de Xalapa, estaban dos niñas indígenas, ya de unos 13 años, aunque en realidad la pobreza les esconde la edad.

La catedral está próxima a sus 150 años, pero es muy moderna. En cada trabe hay una pantalla de plasma donde se puede ver al sacerdote dar su misa, y también están colgadas unas bocinas muy modernas para escucharlo mejor sin que el religioso se lastime su santa garganta. La misa es la primera de 2010 y la iglesia está abarrotada. El padre ya ha hablado de lo que es la familia, formada por un hombre y una mujer; también ha pedido una oración para nuestros funcionarios públicos y felicitó a su rebaño por estar ahí después de la cruda del año nuevo.

Si por casualidad tu mirada cruza con la de uno de los niños indígenas éstos no saben cómo reaccionar: instintivamente lo primero que hacen es tratar de sonreír, pero parece que ya olvidaron como hacerlo y en lugar de alegría lo que sale es una mueca que si te fijas bien tiene un poco de miedo, de autodescontento, no de vergüenza, son muy pequeños y sería una verdadera pena que conozcan lo que es esa palabra.

Las canastas de la limosna por fin llegan al fondo de la catedral. Son ocho, y más de un par de ellas ni siquiera miran a la familia indígena. Están llenas de monedas de diversas denominaciones y algunas tienen billetes, de a 20, 50, 100 y hasta de a 200 pesos. Una de las mujeres ha bajado a su criatura y la sienta sobre el rebozo para que no toque el piso frío, es que no tiene zapatos. La mujer no puede evitar echar una mirada a las canastas que llevan todo ese dinero, más de lo que ella podría tener en cualquier año nuevo, en cualquier navidad y en cualquier otro día.

Desde el suelo, uno de los niños también mira la canasta y todas esas manos que se estiran para dejar los dineros que tintinean alegres al caer. Entonces, quien muy probablemente es su madre busca entre sus ropas alguna moneda, y lo que encuentra se lo da al niño. Alegre, éste se levanta y estira su mano, suelta las monedas que tanto le hacen falta y regresa al suelo con una gran sonrisa. Piensa que es un juego, o quizá que hizo lo correcto, o, peor aún, su madre piensa que con eso su hijo irá al cielo, aunque la tierra sea un infierno.

Mientras el cura dice eso de tomad y comed porque es mi carne y tomad y bebed porque es mi sangre, uno no puede dejar de pensar en toda la falta que les hará ese dinero, y todo para qué, carajo, para que de ahí compren pantallas de plasma, bocinas, micrófonos, cámaras de seguridad y videocámaras. Qué jodida vida, estamos en la era medieval, dando lo poco que se tiene para comprar un cachito de cielo. La doble moral en las narices de dios. El demonio institucionalizado, exprimiéndole la vida a los más pobres sin piedad alguna. Y nosotros observando el espectáculo desde la primera fila. Ni para qué pensar en los 20 millones de mexicanos en pobreza alimentaria.

Una mujer que ha observado la escena llora. Llora en secreto y no es justo. ¿Te ha pasado que lloras de rabia? ¿De impotencia? ¿De saber que algo está mal y nada va a cambiarlo porque muy probablemente no es culpa de nadie? Y por supuesto, nadie se busca culpas gratis. Que otro se preocupe, que sea otra persona la que llore, yo no, yo estoy bien, yo tengo chamarra y dinero porque para eso estudié. No, no es culpa de nadie.

La hostia está lista y las personas se forman para comulgar. Por supuesto, los indígenas se quedan, ellos no pueden recibir a dios. En las pantallas se ve a cada uno de los feligreses comiendo esa insípida masa blanca.

Y en la parte final, cuando se le desea al prójimo que la paz del Señor esté con él, muy pocos dan la mano a esta familia de pobres, son ninguneados igual en la calle que en la iglesia. Y su voluntad se hará, pero añicos.

Ya fuera de la catedral, la mujer que lloró hizo suyo el problema y respondió como pudo: dándole un billete de 20 pesos a la señora indígena. No fue una limosna, fue simplemente querer ser un poco más justa y menos egoísta.