* Desafíos conjuntos y una nueva era de cooperación entre México y Estados Unidos
* Promover el crecimiento económico de abajo hacia arriba para impulsar las economías de ambos países.
* Establecer un marco bilateral sobre energía limpia y promover la energía renovable
* Crear mejores oportunidades comerciales entre México y Estados Unidos: fortalecer y no restringir el comercio.
Distrito Federal, 16 de Abril de 2009.- Durante el primer encuentro entre los mandatarios de México y Estados Unidos en suelo nacional, tanto el presidente Felipe Calderón como el presidente Barack Obama mostraron su preocupación por la violencia generada por el narcotráfico y estuvieron de acuerdo en que el problema del tráfico de armas y estupefacientes es de ambos países.
Estos son algunos de los desafíos que el presidente Felipe Calderón y el presidente Barack Obama analizaron, en una reunión que fortalecerá el lazo entre ambos gobiernos y creará, como mencionó el presidente Calderón “una nueva era de cooperación entre México y Estados Unidos”.
El presidente Barack Obama mencionó que si bien es básico trabajar juntos para sobrellevar los distintos desafíos que enfrenta México y Estados Unidos, entre ellos el cambio climático, la batalla contra el narcotráfico y los migrantes, la responsabilidad no es únicamente de México, sino también del vecino del norte. Barack Obama mencionó que el 90% de las armas utilizadas en México por el narco provienen de Estados Unidos, por lo que la responsabilidad también concierne a éste país.
Durante su discurso, el presidente Obama enfatizó que se pretende trabajar en unión con México para “atacar el flagelo del narcotráfico” en la zona fronteriza, por lo que se ha aumentando la cantidad de policías del lado de Estados Unidos para revisar a quienes entren y salgan del su territorio.
Mencionó que se dedicarán hasta 59 millones de dólares a través del Departamento de Seguridad para defender la frontera y para atacar con mas fuerza al crimen organizado en ambos países
También se pretende acelerar la Iniciativa Mérida para proveer a México de equipo militar de vanguardia, así como instar al Senado norteamericano a implementar un tratado para limitar el trafico de armas pequeñas.
Por su parte, el presidente Felipe Calderón mencionó que la prohibición de armas de asalto tiene sentido y que se podrán respetar y honrar los derechos de la Segunda Enmienda de la Constitución Norteamericana sin afectar los derechos de los ciudadanos norteamericanos de portar y adquirir armas.
“Será cuestión de ver como se puede mejorar la vigilancia, pues incluso con las leyes existentes llevar armas de un país a otro es ilegal”, mencionó el presidente de México.
*Nota publicada en la página de Enfoque Noticias
